Roxane Gay

Roxane Gay tiene una gran demanda y se ha convertido en un elemento básico en el siglo 21 feminista canónico. Su colección de ensayos de 2014, Bad Feminist, fue devorada por académicos y el público en general, tanto que, al año siguiente a su lanzamiento, Reductress satirizó en un artículo que, si no hubieses leído Bad Feminist, seras una mala feminista.

Experta por experiencia en microagresiones, este es un caso bastante común para Roxane. “En un momento del libro escribí sobre mi peso más alto, y me sorprendió realmente la cantidad de personas que se enfocaron en ese número, fue incluido en los titulares. No me avergüenzo de eso, pero fue un poco como … ¿en serio? ¿Es esto lo que vamos a hacer? Simplemente pierde el sentido del libro “.

Como resultado, la autora dice que ahora está menos interesada en gastar el trabajo emocional para las personas que no quieren participar o comprender. “Me importa lo que piense la gente, pero también hay un segmento de la población con el que nos agotamos. Podemos pasar mucho tiempo preguntándonos ‘¿cómo llegamos al otro lado?’ Y ‘¿cómo podemos hacer que los conservadores se preocupen por los temas liberales y las agendas liberales?’ Y la respuesta es que no “.

Habiendo escrito sobre el racismo y el síndrome de impostor, luchando contra su salida y su ataque sexual en la infancia, ella dice que, sobre todo, la gordura es la cosa más difícil sobre la que ha tenido que escribir. Esto puede parecer sorprendente dada su convicción, que brilla en Hunger, sus memorias sobre su cuerpo, su tratamiento como mujer gorda y negra, y cómo la violencia sexual la llevó a usar la gordura como una forma de lidiar con el trauma. Roxane explica con qué frecuencia las personas temen profundamente hablar de gordura por lo que es, ni siquiera quieren decir la palabra.

The Michigan Daily

Lo fundamental de Roxane sobre los cuerpos es que la gordura no es el problema, sino la forma en que la sociedad se relaciona con los cuerpos gordos. En sus eventos, las mujeres a menudo hablan con Roxane sobre sus experiencias de exclusión estructural, como los lugares de trabajo que no cuentan con camisetas de la empresa en sus tamaños. “Simplemente me rompe el corazón, porque estas mujeres me gritan”, dice ella. “Sé totalmente de lo que están hablando, que no pueden sentir que son parte del grupo”. Estos tamaños existen, es realmente fácil incluir estos tamaños en pedidos de camisetas, pero la gente simplemente no piensa, piensa que si está más allá de eso, está más allá de toda esperanza y no puede participar ”.

Por otro lado, a veces los lectores delgados también se acercan a Roxane para decirle cuánto se relacionan con su trabajo; Probablemente me clasificaría en esta categoría: alguien que no es gordo, pero que se siente en cierto modo relacionado con la forma en que Roxane describe la lucha con la comida. “Eso solía sorprenderme”, dice ella. “Pero lo universal es que todos vivimos en un cuerpo. Y a través de la disciplina, al igual que la alimentación desordenada, las personas de todos los tamaños a menudo intentan crear un orden donde no hay ninguno, y eso es lo común”

Junto con la gordura, los cuerpos a menudo son vistos como “incorrectos” en todo tipo de formas aparentemente arbitrarias y violentas. En abril de este año, Roxane colaboró ​​con Medium para crear Unruly Bodies , una serie de cuerpos que se alzan contra estos límites; Cuerpos de inmigrantes, cuerpos discapacitados, cuerpos en transición, cuerpos envejecidos y cuerpos enfermos, moribundos o muertos. Luego está la “disciplina”, una palabra foucauldiana que describe la forma en que formamos, ordenamos y controlamos nuestros cuerpos. “Maquillaje, ropa, ejercicio, tacones, tatuajes”, enumera Roxane como algunos ejemplos. “Los cuerpos rara vez siguen las reglas. “Todos vivimos en cuerpos que son complicados, y debemos crear un espacio para esa irregularidad en lugar de tratar siempre de disciplinarla”.

Roxane no es ajena a las contradicciones, aparentemente siempre las abraza en su trabajo; explicando cómo es posible ser ingobernable y disciplinado, ser gordo-positivo y odiar tu cuerpo gordo, o una feminista que a veces se involucra en una cultura “no feminista”, sin una disonancia cognitiva abrumadora. Bad Feminist, su exitoso trabajo sobre teoría y práctica, hace esto tal vez más claramente en un ensayo que deconstruye la letra perpetuando la misoginia y la cultura de violación en todas las líneas borrosas de Robin Thicke. Junto con el peligro y la violencia inherente a la canción, ella reconoce que todavía la encuentra pegadiza, y, confusamente, todavía la hace “querer bailar”.